Superinteligencia Artificial: El adviento de la revolución
¡ATERRORIZA A EXPERTOS Y CIENTÍFICOS! ¿Por qué? ¿Cómo será la llegada de una Inteligencia Artificial similar a la Humana? ¿Viviremos en una sociedad en la que coexistan robots y humanos en paz y armonía para siempre jamás? Me temo que no.
Superinteligencia Artificial
3ª Parte
El adviento de la revolución
En la primera parte de este artículo, vimos que los avances desmesurados hacen PUPA. Después, en la segunda parte de este artículo, hemos visto en qué consiste y cómo podríamos llegar hasta la Inteligencia Artificial Humana. En esta 3ª y última parte del artículo veremos cómo llegar, desde ahí, a la Superinteligencia Artificial, de la IAH a la SIA. Y el gran peligro intrínseco asociado. Como decía el tío de Michael Jackson Peter Parker: un gran poder conlleva una gran responsabilidad.
Ya lo llevan avisando desde hace años, pero, si echamos un vistazo a los titulares RECIENTES de la prensa, la opinión de reputados científicos y expertos en el tema de la Inteligencia Artificial sigue siendo unánime: ¡HAY PELIGRO DE EXTINCIÓN PARA LA ESPECIE HUMANA! ⚠️
- BBC, 19/01/216: Stephen Hawking: la humanidad está en riesgo y muchos de los peligros los hemos creado nosotros mismos.
- El País, 9/05/2016: Un equipo de expertos formado por cerebros de Silicon Valley como Bill Gates y Elon Musk, de filósofos como Derek Parfit o Peter Singer, de físicos como Max Tegmark, profesor del Instituto Técnológico de Massachusetts (MIT); investiga en un Instituto de Oxford los riesgos de extinción del ser humano.
Además, las últimas noticias (de este mes, incluso de ayer mismo) sobre nuevos avances en la Inteligencia Artificial y en ordenadores, sólo sirven para confirmar que el momento culmen se acerca muy deprisa:
- El Mundo, 17/05/2016: Jill Watson, profesora de 300 alumnos durante un semestre, es realmente un sistema de inteligencia artificial elaborado por IBM.
- El País, 26/05/2016: Investigadores de EE UU logran entrelazar grupos de cuatro fotones y mantenerlos estables, un paso necesario para la creación de ordenadores cuánticos.

¡ÚLTIMAS NOTICIAS! ¿La Superinteligencia Artificial acabará con la Humanidad?
Pero, veamos qué propone Tim Urban en su artículo “The AI Revolution: The Road to Superintelligence” (La Revolución de la Inteligencia Artificial: El camino a la Superinteligencia) del blog Wait But Why; es decir, ¿qué se necesita para desarrollar una Inteligencia Artificial Humana en cuerpo y alma?
Cuerpo (hardware)
- Velocidad. Si bien, las neuronas humanas funcionan a unos 200 Hz, los microprocesadores actuales van a 2 GHz, es decir, son 10 millones de veces más rápidos. Y es muy probable que, para cuando se haya desarrollado la IAH, esta velocidad sea aún mayor. Además, la velocidad de transmisión neuronal, unos 120 m/s, es insignificante comparada con
el poder de La Fuerzala velocidad de la luz, 300.000 km/s, de los ordenadores. - Tamaño. Contradiciendo al Maestro Yoda, aquí sí que importa: El tamaño del cerebro está limitado por el tamaño del cráneo que lo alberga. Aunque no interesaría que creciera demasiado, ya no solo por cuestiones de estética (y eso que la Barbie es más bien cabezona y también los dibujos animados japoneses), sino porque la velocidad de transmisión neuronal se mantendría contante, y si el cerebro fuera demasiado grande, se tardaría más de lo necesario en transmitir información de un lado a otro dentro del cerebro. En cambio, a los ordenadores se les puede añadir más memoria sin estas limitaciones, lo cual es una clara ventaja.
- Durabilidad. Incluso al lado de un cerebro sano, sin problemas de amnesia o enfermedades graves como el Alzhéimer, la memoria de un ordenador es mucho más precisa y sus transistores menos sensibles al deterioro. Además, se pueden sustituir con facilidad. Por contra, el cerebro humano puede sufrir fatiga, problema del que carecen las computadoras, que funcionan “a toda máquina” el tiempo que sea necesario.
Alma (software)
- Actualizaciones y mejoras. Este es un punto de especial importancia. La IA tiene la capacidad de hacer pruebas consigo misma, introducirse mutaciones, modificando los parámetros que considere y comprobar si hay mejoras de algún tipo. En este sentido, hasta que no podamos hacer algo como la Patrulla-X, los humanos lo tendremos más difícil.

X-Men Apocalipsis. Los superhéroes MARVEL, ¿están mutando para convertirse en los Power Rangers?
- Inteligencia colectiva. La especie tiene inteligencia colectiva, es decir, gracias a elementos clave como el lenguaje o la formación de comunidades, hemos podido llegar a donde estamos. Compartir los conocimientos entre nosotros mismos ha garantizado la supervivencia de nuestra especie y nos ha permitido avanzar, como el caballo de Atila, por encima del resto de formas de vida de este planeta. La escritura facilitó en su momento este proceso, y las herramientas como Internet lo han amplificado. En la actualidad, es sumamente fácil conocer los descubrimientos realizados en el otro lado del mundo y aplicarlos en nuestra vida cotidiana. Una red global de IA podría hacer esto aún con mucha más facilidad ya que la conexión entre cada unidad es prácticamente instantánea. Y aún mejor, podría trabajar como una unidad indisoluble si se plantease un determinado objetivo porque, en principio, no se vería influenciada por sentimientos ni emociones como el ansia viva, la gloria y la fama mundial.
A las puertas de la Superinteligencia Artificial
Hasta este punto hemos recorrido un largo camino, pero por fin estamos a las puertas de la Superinteligencia Artificial (SIA). Lo realmente chocante es que, al ir todo en progresión geométrica, una vez la IA llegue al nivel de IAH, el tiempo en evolucionar hasta SIA será extremadamente corto, según a qué especialista le preguntemos, ¡de minutos a horas! Es decir, en un rato, se sobrepasará el nivel de inteligencia humana y se pasará al siguiente nivel, al nivel Súper.
⚠️ Una vez lograda la Inteligencia Artificial similar a la Humana, en tan sólo unas horas se alcanzará la Superinteligencia Artificial. ⌛
No asimilamos este hecho con facilidad. Que un ordenador nos iguale en inteligencia, nos resulta hasta simpático, pero que algo nos vaya a superar, nos incomoda sobremanera porque perderemos la posición de poder y ya no seremos los seres más inteligentes del planeta.
Una cuestión de perspectiva
Solemos pensar que, respecto a las demás inteligencias que nos rodean, estamos algo así:

Wait But Why. En nuestra distorsionada visión de la realidad creemos que la Inteligencia Artificial crece de manera lineal. ¿Acaso tenemos complejo de superioridad?
Pero, como realmente estamos, es así:

Wait But Why. Realmente, la Inteligencia Artificial crece de manera exponencial y, cuando nos alcance, ¡nos va a pillar por sorpresa!
Una vez más, la diferencia entre nuestra visión distorsionada y la cruda realidad, se debe a que el crecimiento de la IA no es lineal sino exponencial, como la Ley de Rendimientos Acelerados, y que se explican en profundidad en el artículo de Mother Jones «Welcome, Robot Overlords. Please Don’t Fire Us?» (Bienvenido, Señor Robot. Por favor, no nos despida).

¿Cuánto tiempo falta para que los Ordenadores igualen al Cerebro Humano en potencia de cálculo? El volumen del Lago Michigan (en unidades «onzas de líquido») es equivalente a la capacidad del cerebro (en cálculos por segundo). Los ordenadores duplican su capacidad cada 18 meses. A esa velocidad, vemos muy poco progreso durante mucho tiempo y, de repente… ¡ya está! Mother Jones
¿Cómo van a producirse todos estos acontecimientos?
Inicialmente, la IA llegará al tamaño mediana igual a la humana, pero, debido a que le aplica la Ley de Rendimientos Acelerados, una IA programada para mejorarse que se halla en el nivel de humano disminuido, en cuanto se automejora, en un instante, alcanza el nivel de Stephen Hawking. Una vez está en ese nivel, con el conocimiento que ha adquirido, se retroalimenta y seguirá ascendiendo, en cada reiteración, llegando a niveles muy superiores sin necesidad de detenerse.
De esta manera, una vez aparezca la SIA, no estaremos en condiciones de saber y mucho menos comprender como actúa, precisamente porque es cuenta con una inteligencia desde 10 veces mayor hasta 10 millones de veces más como poco.
Aunque no soy muy partidario de la medida de inteligencia mediante Coeficiente Intelectual (CI), podríamos utilizarlos para entender un poco mejor este aspecto. Se supone que una persona con CI 80 puntos no es demasiado lista. Por otro lado, sabemos que una persona con CI de 140 puntos es un superdotado mental. Ahora bien, ¿cómo llamaríamos a algo con un CI de 15.000 puntos? ¿Y si fueran 15.000.000? Ni idea.
Pero sí tenemos claro que la inteligencia es poder. Así, la especie humana puede decidir el destino de muchas otras especies, aunque no se le ha dado muy bien, precisamente.
Una Superinteligencia Artificial tendrá la respuesta a muchas incógnitas que se nos plantean en la actualidad. ¿Obtener energía renovable, limpia y eficiente? ¿Eliminar la contaminación? ¿Acabar con enfermedades incurables? ¿Encontrar la clave para no envejecer? ¿Desvelar los misterios que esconde el universo? Una SIA lo tendrá muy fácil.
Pero ¿y si la SIA decidiera acabar con la vida en nuestro planeta para garantiza su propia existencia? Al fin y al cabo, es una máquina que no tiene la misma moral ni los mismos valores que nosotros ¿o quizás sí?

Isaac Asimov (1920 – 1992). Escritor y bioquímico de origen ruso, nacionalizado estadounidense, desarrolló en sus obras literarias las célebres leyes de la robótica que llevan su nombre.
LEYES DE LA ROBÓTICA DE ASIMOV
1ª LEY: Un robot no hará daño a un ser humano o, por inacción, permitir que un ser humano sufra daño.
2ª LEY: Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres humanos, excepto si estas órdenes entrasen en conflicto con la 1ª Ley.
3ª LEY: Un robot debe proteger su propia existencia en la medida en que esta protección no entre en conflicto con la 1ª o la 2ª Ley.
Supongamos que construimos una Superinteligencia Artificial y que, en su proceso, no acaba con nuestra existencia. Supongamos que la programamos para que haga sonreír a los humanos. ¿Nos paralizaría los músculos faciales para hacernos mantener dicha expresión? Afinamos un poco más nuestra solicitud y le pedimos que nos haga felices. ¿Nos estimularía los centros de placer del cerebro y, de paso, desactivaría las áreas sin uso para lograr un funcionamiento energético más eficiente?
La SIA, en definitiva, desde el mismo momento de su nacimiento, será el ser más poderoso de la existencia, y de la cual dependerán todos los seres vivos del planeta. Por eso, podría ocurrir que la Superinteligencia Artificial sea lo último que inventemos los humanos. Es concluyente que la SIA va a ser una deidad digital, ahora, tan sólo queda preguntarnos si será…
¿Un dios bueno o malvado?